En esta, la biografía más animada y accesible de Edmund Burke en un solo volumen, Russell Kirk combina ingeniosamente en un todo viviente lo privado y lo público de Burke. Nos ofrece una nueva perspectiva del gran estadista, que goza de una influencia aún mayor hoy que en su época. Russell Kirk fue una figura destacada en el resurgimiento del interés estadounidense por Edmund Burke tras la Segunda Guerra Mundial. Hoy en día, nadie que se tome en serio los problemas de la sociedad se atreve a permanecer indiferente ante \"el primer conservador de nuestra época de problemas\". En palabras de Russell Kirk: \"Las ideas de Burke interesan a cualquiera hoy en día, incluyendo a los hombres que disienten amargamente de sus conclusiones. Si los conservadores supieran lo que defienden, Burke es su piedra de toque; y si los radicales desean poner a prueba el temple de su oposición, deberían recurrir a Burke\". Kirk desarrolla lúcidamente la filosofía de Burke, mostrando cómo se reveló en situaciones históricas concretas durante el siglo XVIII y cómo Burke, a través de su filosofía, \"habla a nuestra época\". Este volumen hace vívidas las cuatro grandes luchas en la vida de Burke: sus esfuerzos por reconciliar a Inglaterra con las colonias americanas; su participación en la reducción del poder interno de Jorge III; su procesamiento de Warren Hastings, el Gobernador General de la India; y su resistencia al jacobinismo, la \"doctrina armada\" de la Revolución Francesa. En cada una de estas grandes etapas de su vida pública, Burke luchó con apasionada elocuencia y lógica implacable por la justicia y el equilibrio adecuado entre orden y libertad. Con un instinto certero, fruto de su simpatía y comprensión, Kirk nos ofrece la cita incisiva, el punto culminante esclarecedor, los elementos conmovedores y profundamente humanos que dan vida a Burke y a su época. Gracias a las hábiles evocaciones de Russell Kirk, Edmund Burke se convierte en nuestro contemporáneo en estas páginas. \"Dado que la corrupción y el fanatismo asaltan nuestra era con la misma intensidad que asolaron la época de Burke, la resonancia de la voz de Burke aún resuena entre el aullido de nuestros vientos de doctrina abstracta\".