En 1951, Gaston Leval analiza la relación entre el estado y la historia, argumentando que el estado es una construcción social que ha evolucionado a lo largo del tiempo. Su motivación radica en la defensa de la autonomía individual y la crítica a las estructuras opresivas del poder. Leval busca demostrar cómo las luchas sociales y las experiencias colectivas han moldeado la historia, abogando por una sociedad más justa y libre.