«La evolución de las civilizaciones» es un análisis exhaustivo y perspicaz de los factores que explican el auge y la caída de las civilizaciones. Quigley define una civilización como «una sociedad productora con un instrumento de expansión». El declive de una civilización no es inevitable, sino que se produce cuando su instrumento de expansión se transforma en una institución, es decir, cuando los acuerdos sociales que satisfacen necesidades sociales reales se transforman en instituciones sociales que sirven a sus propios fines al margen de las necesidades sociales reales.