Publicada en 1920, la obra de Arthur Cecil Pigou surge en un contexto de posguerra y cambios económicos significativos. Su tesis central argumenta que el bienestar social puede ser mejorado mediante la intervención del Estado en la economía, especialmente en la corrección de fallos del mercado. La estructura del texto aborda temas como externalidades, impuestos y subsidios, proponiendo soluciones para maximizar el bienestar colectivo. La relevancia de la obra radica en su influencia en la teoría económica del bienestar y en las políticas públicas, sentando las bases para el análisis de la economía moderna y la intervención estatal.