Publicado en 1896 en Alemania, esta obra surge tras la conclusión de la trilogía de El Capital y en pleno debate sobre la viabilidad del socialismo. Su autor, economista austríaco formado en la tradición marginalista, retoma y profundiza en la crítica a la teoría del valor y de la explotación de Marx, señalando contradicciones internas entre la ley del valor y la determinación del beneficio. Organizada en varios ensayos breves, introduce la noción de intensidad psíquica para redefinir conceptos como la tasa de interés y el precio de producción. Al cuestionar la primacía del trabajo como único origen del valor y reivindicar la importancia de las percepciones subjetivas, se convierte en la refutación clásica del marxismo económico y anticipa desarrollos de la Nueva Economía Institucional.